ADICCION AL SEXO PODRIA SER CONSIDERADO COMO UN TRANSTORNO MENTAL...

Aunque muchos dudan de la real existencia de este cuadro, psiquiatras evalúan incluir el "desorden de hipersexualidad" en el próximo manual de diagnóstico de trastornos mentales.

Algunos especialistas estàn utilizando los mismos procedimientos que se aplica al tratamiento de otros desordenes mentales como los de alcohòlicos anònimos , ludòpatas y bulìmico,etc,

"El esquema de AA se ha adaptado tambièn para aplicarlo al tratamiento de adicciones a sustancias químicas y comportamientos, como la adicción a internet o a las compras", explica el psiquiatra Rolando Chandía, director de Alfa Adicciones, quien agrega que "en EE.UU. es un modelo de intervención grupal que tiene una alta credibilidad, tanta que se exige a las clínicas de adicciones tenerlo implementado".

Mavis Humes Baird, terapeuta familiar , explicó al diario The New York Times que en este esquema no es tan relevante pedir disculpas, "sino la resolución de cambiar".

Los 12 pasos del esquema de AA parten por admitir que se es impotente ante la sustancia o conducta a la que se es adicto y que la propia vida se ha vuelto ingobernable.

Luego viene una serie de pasos muy arraigados en principios espirituales. En cinco de ellos se alude a Dios (o la figura divina en la que crea o quiera apoyarse el paciente).

"Esto se debería a que, ante la incapacidad de controlar la propia conducta, la salida se busca en algo que no depende de uno, sino de una fuerza externa", explica la psicóloga Soledad Cartagena, experta en sexualidad de la consultora Ikastola.

"Otro aspecto importante del modelo de AA es el refuerzo del grupo, la posibilidad de recurrir al apoyo de otros que han pasado por lo mismo", agrega la psicóloga.

En esos encuentros grupales, dijo Baird a NYT, "los adictos describen cómo sus hábitos han dañado a su familia, amigos y carrera; hacen un recuento de sus mentiras, subterfugios e intentos de culpar a otros". Nuevamente, algo de eso hubo en su discurso: "Elin merece elogios, no culpas"; "Elin nunca me golpeó esa noche ni ninguna otra noche".

Otros pasos de la intervención, dijo Baird, consisten en aislar al paciente de su familia por varias semanas y en abstinencia: se le prohíbe masturbarse, acceder a pornografía o a mujeres, situaciones u objetos que podrían interferir con su comportamiento sexual.

La terapia individual es también parte del tratamiento de las adicciones. "Es fundamental manejar las variables que han llevado al sujeto a buscar sexo, drogas u otro elemento, y ayudarle a manejar esos estímulos que podrían reactivar la conducta adictiva", dice Cartagena.

Otro aspecto, agrega Chandía, es "el apoyo farmacológico, si es que hay una comorbilidad psiquiátrica, como trastorno obsesivo compulsivo o bipolar, ansiedad, u otro, que en general afectan a entre 50 y 70% de los pacientes con adicciones".

¿Es o no una patología?
La adicción al sexo se define como una conducta sexual compulsiva, que interfiere con la vida normal y causa trastornos severos en la familia, seres queridos, amigos y entorno laboral.

"Hay casos claros en los cuales estas personas arruinan sus vidas debido al sexo", dice el psiquiatra Michael First, editor del DSM, manual de diagnóstico de desórdenes mentales, en cuya próxima versión se está considerando incluir el "desorden de hipersexualidad".

"En términos clínicos, estandarizar su definición ayudaría a diferenciar si se está frente a una real adicción", dice Cartagena.